El lehendakari Iñigo Urkullu ha recibido esta miércoles en la sede de Lehendakaritza al presidente del Grupo Kutxabank, Anton Arriola, en el primer encuentro oficial que ambos han mantenido tras su designación. 
En la reunión, Arriola ha transmitido al lehendakari su diagnóstico acerca de la evolución de la economía mundial y vasca en los próximos meses, “que continuará durante un tiempo muy mediatizada por la guerra de Ucrania, con la consecuente volatilidad derivada de la incertidumbre y un impacto recesivo sobre la economía”.
En ese sentido, el presidente de Kutxabank ha reiterado la vocación de la entidad de “mantenerse como un importante motor económico y social en los territorios en los que opera”, por lo que valora como crucial “seguir apoyando a las personas, familias y empresas de nuestro ámbito, redoblando los esfuerzos allá donde sea necesario, desde nuestro compromiso de ser parte de la solución”. Así, Kutxabank cuenta con una inversión crediticia productiva que supera los 47.000 millones de euros destinados a empresas y familias. La entidad ha traspasado a la economía real, en los últimos 5 años, alrededor de 1.000 millones de euros en concepto de pagos a sus cerca de 5.000 proveedores en Euskadi.          
Anton Arriola Boneta es presidente de Kutxabank desde el pasado 30 de noviembre, tras asumir la presidencia del banco con el objetivo de proyectar su servicio financiero en una nueva etapa, que estará marcada por el compromiso con la sostenibilidad, los avances tecnológicos y por la exigencia de responder a las expectativas de sus clientes. Kutxabank es la entidad financiera con mayor presencia en Euskadi. Responsabilizada con la inclusión financiera, cuenta con presencia en el 97% de los municipios de más de 2.500 habitantes. Además, es la entidad financiera líder en Euskadi con una cuota superior al 40% en hipotecas, nóminas domiciliadas, pensiones y en fondos de inversión.
Arriola ha defendido en todo momento el mantenimiento de la singularidad del Banco, que dedica su dividendo, 1.241millones desde su creación, íntegramente a favorecer las inversiones y las obras sociales que desarrollan sus accionistas únicas, las Fundaciones Bancarias BBK, Kutxa y Vital.