Empresas, centros tecnológicos, universidades y particulares del País Vasco presentaron un total de 1.962 solicitudes de propiedad industrial (patentes y marcas) en la Oficina n la actualidad, en una economía donde el conocimiento y la digitalización son la norma, los activos intangibles se han convertido en el principal valor y diferenciación empresarial. Desde patentes, modelos de utilidad, diseños industriales y marcas, hasta derechos de autor y secretos empresariales, estos bienes configuran el patrimonio invisible pero esencial de cualquier organización. Su protección y gestión no es solo una opción estratégica, sino una necesidad fundamental que muchas empresas infravaloran para garantizar la sostenibilidad y competitividad en mercados globalizados. Además, la naturaleza misma de estos activos, intangibles y muchas veces difíciles de delimitar, plantea en su identificación, protección, manejo y gestión, retos considerables. En efecto, la fuga de información, la vulneración de derechos y la apropiación indebida de tecnología o ‘know-how’ son amenazas del día a día que, de no abordarse con el rigor adecuado, pueden conducir a enormes pérdidas.

AB Asesores, que en 2024 celebró su 40 aniversario, es consciente de la complejidad que conlleva la identificación, protección y gestión de los activos intangibles, por lo que ofrece a las empresas un estudio de protección global  de estos bienes.

Abordaje integral

La protección de los activos intangibles requiere un abordaje integral. No basta con el mero registro de una patente, marca o diseño, sino que es necesario establecer medidas jurídicas, organizativas y tecnológicas que permitan proteger, gestionar y defender estos bienes.

Por un lado, están los activos que pueden ser protegidos mediante propiedad industrial, constituida por las patentes, modelos de utilidad, diseños industriales y marcas, figuras que ofrecen un marco jurídico claro para proteger, invenciones, apariencias estéticas y signos distintivos. Las patentes y modelos de utilidad garantizan derechos exclusivos sobre invenciones técnicas y procesos, permitiendo a sus titulares explotar sus innovaciones y frenar su uso no autorizado. Las marcas, por su parte, son esenciales para proteger los signos distintivos que diferencian el origen empresarial de los productos o servicios en el mercado. Y los diseños industriales salvaguardan la apariencia física de los productos y aportan valor a través de la estética.

Una buena estrategia de  protección no solo preserva los activos, sino que contribuye a fortalecer la posición competitiva de las empresas en un mercado cada vez más globalizado y exigente

Por otro lado, la propiedad industrial, en particular los derechos de autor, protegen, entre otras, creaciones artísticas y literarias, así como obras tecnológicas como el software. En un entorno cada vez más digital, la adecuada protección de software y bases de datos adquiere una mayor relevancia.

Sin embargo, uno de los activos más valiosos y, a la vez, más vulnerables, es el secreto empresarial. Toda aquella información confidencial que permite a las empresas mantener una ventaja competitiva, como fórmulas, procesos productivos o listas de clientes, es especialmente susceptible de fuga, tanto por agentes externos como internos. La protección de estos secretos exige medidas rigurosas, como la implementación de acuerdos de confidencialidad (NDAs), controles de acceso (físicos y tecnológicos), formación del personal y auditorías periódicas.

Es por todo ello que AB Asesores pone un énfasis particular en la prevención de la fuga interna de información, un riesgo que, si bien muchas veces es subestimado, es una de las principales causas de pérdida de secretos empresariales. La formación de los empleados, la claridad en las obligaciones de confidencialidad y la implementación de protocolos de seguridad son medidas esenciales para evitar filtraciones involuntarias o malintencionadas.

Por todo ello, la implementación de una estrategia de protección eficaz comienza con una primera identificación y valoración de los activos intangibles. Asimismo, la protección global de los activos intangibles requiere un enfoque multidimensional que combine el uso de herramientas jurídicas nacionales e internacionales con la implementación de protocolos internos adecuados. En un ámbito marcado por la competencia y la digitalización, no basta con registrar los derechos; es necesario adoptar medidas proactivas para proteger el conocimiento y los secretos empresariales.

A lo largo de sus 40 años de actividad, AB Asesores ha ido perfeccionando un enfoque global que abarca la propiedad industrial, intelectual y el ‘know-how’, asegurando que el valor de los bienes inmateriales de sus clientes esté bien protegido frente a cualquier amenaza, tanto externa como interna. Igualmente, la experiencia acumulada demuestra que una buena estrategia de protección no solo preserva los activos, sino que también es fundamental para fortalecer la posición competitiva de las empresas en un mercado cada vez más globalizado y exigente.

En definitiva, AB Asesores ofrece a sus clientes el estudio, desarrollo y ejecución de estrategias personalizadas que garantizan la protección efectiva de sus activos intangibles.